lunes, 27 de abril de 2009

Dulce recuerdo

–Papá…
–¿Sí?
–Esta noche necesito que me lleves al shopping. Nos vamos unas amigas...
–Bueno. ¿Y tengo que ir a buscarte después?
–Esteeee… No, en realidad no, porque después de ahí nos vamos a bailar.
–¿Vas a ir a bailar?
–Psee...
–¿Tengo que ir a buscarte a la madrugada?
–Mmm... no. Vengo directamente mañana a la mañana.
–¿Cómo? ¿A qué hora termina el boliche?
–Y... a la mañana.
–¿Tantas horas? Pero hija, vos nunca saliste tanto tiempo.
–Por eso mismo. Quiero empezar a aprovecharlo.
–¿No es demasiado? –dijo, y esa mirada se leía la sospecha.
–¡Ay, papá! Antes, porque no salía. Ahora, porque salgo. ¿Puedo divertirme en paz con mis compañeras por una vez?
–Sí, sí... Me gusta que salgas. A propósito... ¿quiénes van?
–Y... las chicas.
–¿Podés darme el teléfono de alguna? Digo, por las dudas... Por cualquier cosa...
–Sí, claro. Estee... a ver, sí… anotá.
Le di dos números telefónicos falsos, rogándole a Dios y a todos los santos que jamás fuera a llamar y descubrir mi mentira. No hay caso, a quienes la naturaleza no les da instinto de madre, le da perspicacia de padre.
Esa noche, a la hora prevista, me dejó en la puerta del shopping.
–Bueno, cuidate, ¿eh? –me recomendó, y otra vez esa mirada inquisitiva.
–Sí, sí –dije–. Vos, tranquilo.
–¿Adónde están tus compañeras? –preguntó, sacando la cabeza por la ventanilla del conductor.
–Y, deben estar adentro. Voy a buscarlas, pero no te quedes esperando, vos andá nomás. Chau.
Subí las escalinatas del centro comercial y me di vuelta con disimulo, para corroborar que el auto blanco ya había desaparecido entre el tráfico de la avenida.
Después me fui derecho hasta donde él debía estar esperándome.
Lo reconocí a la distancia. Su presencia, su figura, su porte y esa poderosa atracción que me provoca eran inconfundibles.
Nunca voy a poder olvidar esa noche. Nuestra primera noche, la primera salida romántica. ¡Estaba tan emocionada de salir con un hombre..!
Me había “producido” especialmente para la ocasión. Quería gustarle, quería que el se sintiera atraído por mí de la misma forma que yo por él.
Tengo en mi mente grabada la imagen de ese momento.
Mientras yo apuraba el paso para llegar, sentía que él me miraba desde donde estaba sentado en la mesa de afuera de ese café, cercano a una de las puertas del shopping.
Ahí estaba, con su pantalón clarito, camisa con botoncitos en el cuello y ese suéter a rombos que le queda tan lindo. Por supuesto, llevaba el llaverito en el cinto... ¡que me vuelve locaaaa!
(¿Alguien podrá explicarme qué atractivo fetichista puede tener un llavero de cinto?).
Mientras me acercaba, no me sacaba los ojos de encima, regalándome esa mirada tan tierna que me reserva solamente a mí.
–Hola, mi amor… –dije, con el nerviosismo propio de una mujercita desbordante de amor y pasión, emocionada por encontrarse con su hombre.
Se acercó y me besó en la comisura de los labios. Percibí el olor del perfume que tanto me gusta.
No sé si fue el conjunto que vestía, el llaverito o el perfume (o todo junto), pero se me aceleraron los latidos del corazón y, como por arte de magia, apareció la cosquillita ente las piernas. Entiéndase que la cosquillita, venía con compañía porque también sentí que empezaba a mojarme.
–Hola, Bebi.
–Papi… ¡Mi vida!
–¿Qué, mi amorcito?
–Mirá, me puse linda para vos. Me puse aritos, pantalones nuevos y botas de cuero... ¿te gusta?
–Y te maquillaste –dijo, besándome la nariz (lo había advertido)–. Estás hermosa, mi amor.
–Vos también. Me pone muy loca verte vestido así, ¿sabías?. Esa ropa te queda muy bien. Sos tan... tan... ¡tan varonil!
Se rió y me abrazó de la cintura.
–Bueno… ¿Querés que vayamos a cenar?
–Bueno, adonde vos digas.
–Hay un restaurante muy bonito a dos cuadras, ¿te parece?
–Sí, papi.
Nos tomamos de la mano y fuimos hasta ese lugar. Pasamos una velada maravillosa.
Me sorprendió que me tratara como a una reina: me abrió la puerta para entrar, me corrió la silla para que tomara asiento y depositó frente a mí, sobre la mesa, una bolsa de la perfumería del shopping.
Cuando abrí el paquete, descubrí la sorpresa: era el perfume que le había mencionado, un día antes, que me hubiera gustado tener y él no sólo se había acordado de la conversación, sino del perfume. Me sentí la mujer más halagada de todo el mundo.
Durante la cena, me dio de comer algunos bocados de la entrada con su tenedor, por primera vez me sirvió la gaseosa y siguió haciéndolo cada vez que veía mi copa vacía.
Mientras esperábamos que nos trajeran el pedido, me tomó la mano y me la besó por sobre la mesa y me pareció no sólo dulce, sino lo más natural.
Yo, una adolescente aniñada, sentada frente a ese hombre canoso, en el restaurante lleno, recibiendo todas esas atenciones y gentilezas que ni siquiera había imaginado en mis más alocadas y románticas fantasías.
Yo estaba fascinada. Sentía que amaba con toda mi alma a ese hombre que tenía frente a mí. Sentía que lo deseaba, que me hacía feliz, que anhelaba pasar toda la vida a su lado... Y que era la mujer más dichosa sobre la faz de la tierra.
A medida que transcurría la noche, sentía que mi cabecita se disparaba con fantasías. La música de fondo, su presencia, el perfume que me embriagaba, la noche, el ambiente, el bienestar que sentía, sus palabras dulces... Todo me incitaba a desearlo.
–Bueno, papi… ¿vamos? –le dije, cuando terminamos de comer y él dio el último sorbo a su copa de vino.
–Sí, Princesita, pago la cuenta y vamos.
Una vez fuera, le hice una seña para que se acercara y le susurré al oído:
–Cuando lleguemos al hotel tengo que decirte algo importante.
–¿Qué?
–No, no, cuando lleguemos te lo digo.
Durante el viaje en taxi hasta el hotel estuvimos acariciándonos y mimándonos sin que el chofer se diera cuenta y cuando entramos en la habitación en penumbras, cerró la puerta, me rodeó con sus brazos y me preguntó:
–¿Y? ¿Qué era lo que querías decirme?
Antes de contestarle, le indiqué que se sentara en la cama, me senté sobre sus rodillas y acercándome a escasos centímetros de su boca, le confesé:
–Mi amor... Estabas tan lindo que te deseaba todo y tenía ganas de que llegara este momento para tenerte acá, todo par mí.
Sin darle tiempo a que dijera ni una palabra, le di un beso en los labios y comencé a acariciarle el cabello y ese cuerpo sólido y firme que tiene.
La noche terminó de la mejor manera.
Como yo lo había imaginado, desde que lo encontré sentadito esperándome.
Y para hacer más dulce el recuerdo de esa noche, mi papá –esa vez–, ni siquiera sospechó que no había estado en un boliche con mis compañeras.

Lolita

PD: Lamentablemente, no tenemos una foto de esa noche. Si la hubiésemos tenido, creo que bien hubiera valido la pena publicarla.

26 comentarios:

  1. Ay pero que romantico, que caballero el Profesor!, son pocos los que quedan asi ya, saludos!

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  2. Y sigue siendo un secreto?

    Saludos ausentes, bello recuerdo.

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  3. Mi ahijadita!!!!
    Querida bebota, qué lindo post!!!!!!!
    El Profe tiene la caballerosidad de los hombres de bien (bien educados), y esos detalles hacen que las mujeres nos sintamos diosas, porque una cosa es pelear por nuestros derechos y otra es no perder la femineidad y delicadeza; y recibir las atenciones de un hombre. Muchos creen que eso es patético y mujeres sienten que dejan de serlo por recibir esas gentilezas, particularmente, creo lo contrario.
    No somos iguales, somos delicadas, y es lindo apoyarse en la fortaleza de un hombre y JUNTOS caminar por la vida.
    Me encantó todo lo que escribiste, princesa!!
    Te quiero mucho chiquita!!!!!
    Besos enormes a ambos, mis amigos queridos!!!

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  4. Los primeros momentos al lado de quien se ama siempre son los mejores :)

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  5. Asi se debe tratar a la mujer, todas lo merecen, ahora muchos olvidan el romance.
    Cuanta experiencia tiene el profesor, sabe que hacer en cada paso durante las citas, tu niña aprende que siempre te deben tratar así.

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  6. Me ha encantado esta primera cita. Ha sido todo lo romántica que podía ser. Todo un caballero, Profesor. Yo también estaría enamorada de un hombre así.
    Saludos desde La ventana de los sueños.

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  7. oissss... q gentil el profe.. una pena lo de la foto estaria bien verla lo felices q sois

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  8. Caperucita idiota y el lobo mañoso

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  9. Que bonito Loli, esas primeras salidas sonas mejores una se siente una reina....

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  10. Srita Amor:
    Si, mi papi es todo un caballero y aún ahora, casi un año y medio después, sigue comportándose igual y jamás olvida los detalles.

    Amorexia:
    No, no, afortunadamente ya puedo verlo tranquila. Mi papá ya sabe e incluso cada vez que viene lo invita a almorzar y se quedan charlando un montón!
    El secreto y las salidas a escondidas duraron unos 9 meses.

    Paulis!!!
    Mi madrinita!!
    Si hay algo que me enamora nuevamente de mi profe cada día es esa masculinidad, caballerosidad, educación y cordialidad que lo caracteriza.
    Un chico de mi edad no hace esas cosas. Pocos tienen esos detalles. En cambio mis papis lo tiene incorporado como un modo de vida y me encanta!!!
    Me siento la princesita del universo cuando estoy a su lado.
    Yo también te adoro madrinita!!!
    Un beso enorme para vos!

    Vampyrus Alice Virux:
    Los recuerdos de la primera vez nos llenan de ternura el corazón y siempre nos hacen aparecer una sonrisa en los labios.

    Antonio:
    Yo ya estoy acostumbrada a ser una princesita en su compañía. No dejaré que nadie me trate de manera inferior a lo que me dio mi papis. Él es el hombre más caballero que conocí en mi vida.

    Anabel Botella:
    Y si. Imposible no amar a un hombre que te hace sentir una mujer importante vayas donde vayas.

    Diario de nuestros pensamientos:
    ¿Qué foto? ¿Quién nombró una foto?
    Además, desafortunadamente, no tengo ninguna foto de ese día tan especial... solo me queda el recuerdo y las imágenes grabadas a fuego en mi cabecita.

    Anónimo:
    Romeo y Julieta y el envidioso.

    Muchas garcias a todos los que pasan por aquí dejando sus comentarios!

    Un besito.

    Lolita

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  11. Cris:
    No sólo las primeras. Él me trata así siempre, en todo momento y lugar. Aunque si, las primeras son las que más dejan huella.

    Un besito

    Lolita

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  12. Increible la capacidad nuestra, de las hijas, parw hacer estas mentiritas piadosas por amor :)

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  13. Flora:
    Con el profe hemos hecho las cosas más insólitas en nombre del amor. Él es mi cómplice en todo. Ji, ji.

    Lolita

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  14. Lolita, Profe,
    vuestro blog es de los mejores que se pueden leer. Los felicito, nuevamente, desde lo profundo de mi alma.
    Cariños.
    Ali

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  15. No hay momentos como los primeros.
    ¡Cariños!

    Caro

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  16. Alicia:
    Gracias por el elogio... nos hizo poner colorados a ambos.

    Carolina:
    Es cierto. Las primeras veces tienen una magia muy especial que siempre se recuerda con cariño y una sonrisa...


    Lolita

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  17. Me resulto muy obvio qe no ibas a un boliche :P nunca te habia leido antes, pero se que seguis mis blogs, gracias.

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  18. Romeo y Julieta jojojo

    ese romeo es un anciano

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  19. Marie Agustine:
    ¿Y por qué te pareció Obvio? No te creas ¿eh? Mi papá me creyó...


    Anónimo:
    Porque haya crecido no deja de ser Romeo.El de la historia murió jóven, pobre, pero mi Profe es el primer romeo que llega a la madurez. :)

    Lolita

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  20. No importa la foto Lolis, lo importante es lo pasional de ese amor que se profesan. Tan fuerte que tu narrativa como la del profe siempre nos hacen sentir en el lugar de sus vivencias...

    Besos por dos

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  21. Loli, tu padre se lleva bien con el Profe, pero, ¿y tu mamá? ¿ya lo acepta o te ha vuelto a montar alguna como la del día de tu graduación?

    Besitos!

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  22. BELMAR:
    Muchas gracias!

    Adrianina:
    Qué bueno que podamos provocar ese efecto!

    Natalia:
    ¿Mi madre? Pues claro que hizo algo!
    ¡Cuándo no dando la nota!
    Ya lo contaremos en un post posterior lo que hizo en esa ocasíon...


    Un besito

    Lolita

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  23. ¡Qué linda historia!, me encantó...

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  24. que lindas esas mentiritas ♥
    Me siento mal...me hubiese gustado ir...pero bueno no va a faltar oportunidad, saluditos para los 2.
    muah!

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  25. aaaaaaaaaaaaaaai me morii cuando lo leí, eeeeeeeeeeeeeeeees hermoso todo lo qe hizo y qe terminen asii re bien,, lo qe daria para tener a alguien asiii y qe me salga todo bien, lamentablemente me sale TODO mall.
    Hermoso el blog :) un besito

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Lolita y El Profe